El jurado del Concurso de Anteproyecto para definir la Ordenación, Urbanización y definición del Límite Este de la Dársena Interior del puerto de Valencia decidió la semana pasada dar como ganador el proyecto presentado por la empresa Proyecta Arquitectura, Ingeniería y Urbanismo.

La propuesta ganadora conjuga el elemento límite, formado por piezas prefabricadas a modo de jardineras, con amplias zonas ajardinadas, (que podrían llegar a tener una superficie total de unos 25.000 metros cuadrados), calzadas para tráfico rodado y ciclista, espacios peatonales y graderías con vistas al nuevo canal, único espacio de acceso vía marítima a la Dársena Interior. En primer lugar, se creará un espacio de ordenación entre el viario urbano adyacente al recinto portuario y la propia Dársena, comenzando junto al Tinglado Número 5, a partir del cual comenzará el paseo a lo largo del frente Este de la zona.

Se mantiene el puente
El trazado sinuoso caracterizará tanto el recorrido peatonal como el tráfico rodado, separados ambos por áreas ajardinadas que delimitarán el conjunto de la ordenación.

La segunda secuencia unirá, a través de una pasarela tendida, los dos muelles trasversales preexistentes, con el fin de conservar e integrar los elementos actuales del cantil. En este sentido, se propone también mantener el actual puente levadizo, no sólo como elemento integrador del recorrido, sino también como claro testimonio de la función que ha cumplido hasta ahora. A partir de la pasarela, se van disponiendo las diferentes áreas de estancia, algunas rodeadas de zonas verdes y otras actuando de miradores sobre el cantil, con vistas directas, entre otros, sobre la Dársena Interior, bases de los equipos y edificio de invitados.

A continuación, y con una forma ondulada, se dispondrá una ladera que desempeña la función de graderío con un gran campo visual sobre el canal y la bocana exterior, permitiendo así ver de cerca la entrada y salida de las embarcaciones.

Respecto a las especies arbóreas, la propuesta responde en todo momento a los criterios de resistencia al ambiente marino y a la caducidad y rapidez de crecimiento. Algunos ejemplos son el uso de la palmera dactilífera, el álamo blanco o la grevillea, complementados con adelfas de flor blanca o especies aromáticas tales como el espliego o el romero. Por último, en la zona de la nueva marina se habilitará una zona para dar servicio a los nuevos amarres previstos en el lugar.