Las terminales del puerto de Valencia han acordado establecer una tarifa de cinco euros por contenedor para sufragar los costos de la implantación de las medidas de seguridad y control establecidas por el código ISPS o PBIP, de aplicación en los puertos españoles desde el pasado mes de julio.

Esta tarifa de cinco euros se aplicará tanto a los tráficos de exportación como a los de importación, aunque sólo afectará a los contenedores llenos y no a los vacíos.

Aunque la tarifa entrará en vigor el próximo 1 de diciembre, no será hasta finales de este mes cuando la Autoridad Portuaria de Valencia la apruebe en Consejo de Administración oficialmente, aunque la medida ya ha recibido el visto bueno de la institución.

Esta tarifa será aplicada en todos los puertos españoles y en principio parece ser que será también de cinco euros, al menos en los casos de Barcelona y Bilbao, principales puertos en volumen de tráfico junto al de Valencia.

Por otra parte, el resto de puertos europeos también están trabajando en la aplicación de esta tarifa, que será de diferente cuantía. Por ejemplo, en el caso de Southampton se ha establecido un importe de 9,9 euros, en Génova serán ocho euros y nueve en el caso de rotterdam o Hamburgo. Los puetos canadienses aplicarán un dólar por contenedor en carga (incluidos los transbordos) y el de Charleston ya aplica un dólar por TEU desde marzo.