Estas son las conclusiones de la segunda conferencia abierta de Valencia Summit, que en esta ocasión contó con los ponentes Fran Llorente, director de informativos de TVE, y Patrick Magyar, director manager del equipo Alinghi. Llorente habló de la creación de más de 100.000 empleos en Valencia hasta el año 2007 y de una contribución al PIB regional del 1,7%.

Por su parte, Magyar hizo especial hincapié en el tipo de relación que su equipo busca en el entorno valenciano, asegurando que “Alinghi, sus espónsores y Valencia serán un buen matrimonio si alinean sus metas de cara al futuro”.

Fran Llorente inició su discurso destacando cómo los grandes acontecimientos deportivos internacionales hacen crecer al ciudadano y a la ciudad y el importante papel que los medios de comunicación juegan en ellos.

Valencia Summit ha quedado consolidada como una cumbre de trabajo destinada a abrir una línea de investigación que permitirá conocer las repercusiones que un gran evento deportivo ejerce sobre las ciudades, tanto la implicación ciudadana como de las diferentes instituciones públicas y privadas y de la propia ciudad en sí. Esta implicación se perfila como el principal eje de acción sobre el que trazar un plan estratégico que permitirá potenciar los recursos de la ciudad, así como su desarrollo en diferentes aspectos.

Precisamente éste ha sido el punto de partida sobre el que los diferentes expertos internacionales congregados en Valencia Summit han trazado las conclusiones que componen el primer decálogo del Manifiesto de Valencia.

Diego Torres, vicepresidente del Instituto Nóos, ha informado también de la preparación de un informe, un libro y un journal electrónico que recogerán tanto el contenido de las diferentes conferencias realizadas como las conclusiones y opiniones de los ponentes congregados para este evento.

Por su parte, Pau Herrera, del Instituto Nóos, presentó una vez concluida la cumbre, un análisis económico de las cifras recogidas durante estos días, entre las que destaca que los beneficios obtenidos a través de la inversión publicitaria en la Copa América de Auckland fueron de 220 millones de euros.