La Fundación Valenciaport acogía ayer una charla-coloquio sobre el papel de las mujeres pioneras en la logística valenciana. Desde las 19 horas en la Sala Venus del edificio de la Fundación Valenciaport, tres mujeres vinculadas al sector pusieron encima de la mesa su experiencia profesional.

Encarnación Giménez, MAría Serrano y Pepa Ruano

Participaron Pepa Ruano, presidenta del Montepío del Colectivo Portuario de Valencia y ex directora del Grupo Mestre en Valencia; María Serrano, ex jefa provincial de la Administración de Aduanas de Valencia; y Encarnación Giménez, gerente de Transportes E. Giménez.

Durante su intervención, Pepa Ruano repasó su trayectoria profesional, primero como trabajadora en el Grupo Mestre y después como directora de la sucursal de la compañía en Valencia. Hizo mención a los cambios normativos acaecidos durante sus años de trabajo, y valoró el apoyo que recibió tanto de su familia como de todo el equipo profesional del que se ha rodeado durante su vida laboral.

Asistentes a la charla

Presente en muchas de las asociaciones del sector durante muchos años, como la Asociación Naviera o el Propeller Valencia, puntualizó que a pesar de ser la primera mujer en ocupar un puesto directivo en una empresa consignataria, siempre tuvo el apoyo de sus compañeros. En la actualidad, es la presidenta del Montepío del Colectivo Portuario de Valencia, y aprovechó la ocasión para explicar a los asistentes la labor e importancia de una asociación como ésta.

María Serrano hizo un somero repaso de su trayectoria en la Aduana del puerto de Valencia, en la que trabajó durante 25 años. Explicó el funcionamiento y evolución de la Aduana durante este período, y manifestó el valor de la automatización de procesos en la inspección aduanera.

Encarnación Giménez, por su parte, relató que comenzó trabajando con su padre al frente de la empresa, y aprovechó para repasar la importancia de la aparición del contenedor en el negocio del transporte marítimo. Asimismo, afirmó que parte de los problemas que tenían hace 20 años se siguen repitiendo -como las colas- y valoró los procesos de informatización de las flotas.