La Alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, intervino ayer ante el Plenario del Comité de Municipios y Regiones de Europa, CMRE, para exponer las características del "impacto local de un acontecimiento deportivo como la Copa América".

Bajo este título, la Alcaldesa pronunció una ponencia en la que ha destacado que "Valencia, más allá de 2007, va a consolidar su posición emergente como ciudad de servicios de calidad, como destino de primer orden para el turismo mundial, como centro de referencia en investigación, aplicación y desarrollo de nuevas tecnologías, y como ejemplo de modernidad y de dinamismo económico y comercial".

Oportunidad
La Alcaldesa se desplazó ayer hasta Bruselas para participar en la reunión plenaria del CMRE, junto al presidente de la Generalitat, Francisco Camps. Rita Barberá se dirigió al presidente de este organismo de la Unión, Peter Straub, y al resto de parlamentarios y miembros del comité, para mostrarles su convencimiento de que "la elección de Valencia como sede de la Copa América significa que la ciudad ha ganado su futuro". "Estamos convencidos de que la organización de esta cita deportiva -añadió Barberá- es la gran oportunidad para Valencia".

En opinión de Rita Barberá, esta elección supone "un magnífico reconocimiento a nuestra capacidad de organización y profesionalidad" y, a la vez, permitirá mostrar las ventajas que ofrece la urbe en virtud de su "privilegiada situación geográfica". Entre ellas, la Alcaldesa se refirió a su ubicación en el Meridiano de Greenwich, que permitirá realizar transmisiones televisivas en directo en las franjas horarias de mayor audiencia, lo que elevará el impacto mediático a más de 3.000 millones de potenciales espectadores.

La Alcaldesa aseguró además que el Ayuntamiento ha puesto sus esfuerzos al servicio de tres objetivos principales: la creación de equipamientos e infraestructuras de calidad, el impulso del desarrollo económico y la consolidación de la proyección internacional".