El presidente de la Federación Valenciana de Empresarios Transportistas (FVET), Francisco Corell Grau, asistió el pasado viernes a la comida-coloquio que organiza regularmente el Propeller Club de Valencia.

En esta reunión se analizaron, entre otros temas, las posibilidades que ofrece el short sea shipping como modo complementario al transporte de carretera. En este sentido, Corell se mostró a favor de esa intermodalidad, pero insistió en la necesidad de no penalizar el transporte por carretera y recordó que en la actualidad representa el 80% del transporte de mercancías en Europa gracias a su flexibilidad y calidad de servicio. Francisco Corell aludió a las nuevas tasas y peajes establecidos en distintos países de Europa, que podrían perjudicar al transporte por carretera en perjuicio del transporte ferroviario y marítimo, señalando al mismo tiempo que los crecimientos previstos, del 40% para los próximos años, no pueden ser asumidos por ningún modo y dejan mercado para todos. “El transporte marítimo debe ser complementario y para que se utilizado por las empresas de transporte debería tener mayor flexibilidad y regularidad - explicó -. Un camión necesita estar en los puntos de destino en día y hora”.

Por otra parte, se habló de las esperas de los camiones a la entrada de las terminales y los retrasos que se produjeron en el mes de diciembre por los paros de estiba. En este punto, Corell aludió a la Directiva Europea sobre Tiempos de Descanso, que en opinión de la FVET perjudicará al sector y a los propios conductores y en el caso del puerto de Valencia hará que las horas perdidas cuenten como horas de trabajo, con el consiguiente incremento de costes.

Las obras del By-Pass y el Acceso Norte fueron otros de los temas tratados en la reunión.