La compañía Ramos Vila ha decidido afianzar la calidad del servicio que presta a sus clientes con el traslado a unas nuevas oficinas.

Plantilla de Ramos Vila. De izquierda a derecha: Luis Fernández, Juan Arnau, Carlos Alonso, Javier Gómez, Ignacio Bernal, Ignacio Ramos y Elena Artero

Tras un sostenido crecimiento en su actividad, debido principalmente a la Certificación OEA, la empresa apuesta por mantener la esencia que ha caracterizado a esta firma familiar desde sus inicios allá por el año 1903: prestar exclusivamente servicios de despacho aduanero.

Ignacio Ramos, gerente actual de la empresa y cuarta generación familiar vinculada a la profesión, explica a esta publicación que con la consecución de la certificación como Operador Económico Autorizado, “podemos despachar desde cualquier aduana, con lo que la actividad de la empresa ha crecido”.

En la actualidad, la compañía cuenta con una plantilla de siete personas, aunque la intención es la de incrementar la plantilla con un nuevo integrante para el Departamento Comercial.

“Seguimos apostando por esa esencia especializada en despacho de aduana”, asegura Ignacio Ramos, en un momento en el que la tendencia del sector es la contraria. “Después de 113 años en el mercado, seguimos ofreciendo la misma calidad en nuestros servicios. Siempre nos han guiado la honradez y la seriedad, eso es lo que me enseñaron y eso es lo que transmitimos a todos nuestros clientes”, afirma Ramos.

Ramos Vila es una de las pocas agencias exclusivamente de aduanas que se mantienen en el mercado. Aunque la primera generación de agentes de aduanas data de 1903, en la figura del bisabuelo de Ignacio Ramos, marino mercante y co-fundador del Colegio de Agentes de Aduanas de Valencia, la compañía se fundó como Ramos Vila en 1990. En la actualidad, además de Ignacio Ramos, conforman la plantilla de la compañía Elena Artero, Luis Fernández, Juan Arnau, Carlos Alonso, Javier Gómez e Ignacio Bernal.