El puerto de Tarragona, referente europeo del tráfico de cereales, con un tráfico de cinco millones de toneladas anuales, ha estado presente en el stand A3 del Centro de Convenciones Internacional de Barcelona (CCIB).

Integrantes de la delegación tarraconense

La Autoridad Portuaria de Tarragona junto con Bergé Marítima, Ership, Euroports Ibérica, Noatum-Codema y Silos de Tarragona han estado a disposición de los clientes y visitantes en la 55ª Bolsa de Comercio Europea que se ha celebrado estos días en Barcelona.

El puerto de Tarragona ha registrado un crecimiento que hace patente su protagonismo en el conjunto de los puertos españoles y europeos, sobre todo en el Mediterráneo. La infraestructura portuaria tarraconense, a pesar del contexto económico, mantiene la tendencia de crecimiento en el tráfico de sólidos sueltos y concentra los mejores servicios en el sur de Europa y el norte de África, manteniendo el primer lugar en el ranking español de estos productos. Hasta el mes de julio, el puerto de Tarragona ha transportado casi un 18% más que en el mismo período del año anterior.

Las infraestructuras portuarias para estos productos han alcanzado un elevado grado de especialización y productividad. Se dispone de más de tres kilómetros de línea de atraque con 14 metros de calado, más de 230.000 metros cuadrados de almacenes cubiertos y las instalaciones cuentan con una capacidad de almacenamiento de casi 1.300.000 toneladas. Las cinco terminales ubicadas en el puerto de Tarragona lo sitúan como la mejor opción del Mediterráneo en el movimiento de productos agroalimentarios. Cabe destacar las importados inversiones realizadas por las empresas estibadoras en automatización de las terminales, adquisiciones de grúas de gran capacidad y la incorporación de sistemas informáticos que mejoran notablemente la logística, como es el ‘Levante Sin Papeles’.

Estas mejoras en los servicios están consolidando el puerto de Tarragona como un potencial hub de este productos en el Mediterráneo, de hecho ya se han llevado a cabo operaciones de transbordo de grandes volúmenes a otros puertos que, por limitación en sus infraestructuras, no pueden recibir barcos grandes tipo ‘Capesize’.