Por segundo año consecutivo, el Port de Tarragona ha participado en la feria BNEW Barcelona celebrada entre el 5 y el 8 de octubre de 2021. El encuentro internacional sirve de plataforma y ponente para compartir retos y proyectos en logística en un entorno muy cambiante donde la sostenibilidad, la transición energética y la innovación son claves para el éxito.

Josep M. Cruset durante su intervención (Foto APT)

El presidente del Puerto, Josep M. Cruset, participó en la mesa de debate "MULTIMODALIDAD EN CLAVE FERROVIARIA" que se celebró durante el día de ayer acompañado de Enric Ticó, presidente de CIMALSA, Joan Carles Salmerón, experto en temas ferroviarios, Isidre Gavin, secretario de Infraestructuras y Movilidad del Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Catalunya, Jordi Torrent, responsable de Estrategia de Port Barcelona, y promovido por el periodista Aitor Vieco.

Refiriéndose al tema del debate de la mesa Cruset, habló de "la saturación de las vías rápidas, la prohibición de la circulación de camiones en determinados días, las zonas de bajas emisiones de las ciudades, la falta de conductores -como ocurre en el Reino Unido-, etc. impulsan el paso de mercancías de la carretera al ferrocarril. En este sentido, el Port de Tarragona estará preparado para dar respuesta a esta tendencia y demanda del mercado con la entrada en servicio de las terminales intermodales de La Boella y Guadalajara-Marchamalo en 2023". Y añadió: “Es necesario que la infraestructura ferroviaria se prepare para esta demanda -adaptando el ancho de vía de túneles y puentes, por ejemplo- para que se corrijan los esfuerzos que están realizando los puertos y otros actores del sector y se puedan poner camiones en los trenes sin problema”.

El presidente del Port de Tarragona ha centrado su participación en el espacio BNEW compartiendo con el resto de participantes los retos que se ha planteado y, al mismo tiempo, escuchando experiencias que le permiten acortar plazos y mejorar su implantación. "2023 será un año crucial para el Port de Tarragona", dijo cruset. En esta fecha coincide con la entrada en funcionamiento de infraestructuras estratégicas para el desarrollo y crecimiento del Puerto.

Este "Horizonte 2023" supone un verdadero punto de inflexión en el que la conclusión de las obras de urbanización y la comercialización de la ZAL (una inversión de 30 millones de euros); la mejora y modernización de la terminal intermodal de Boella (20 millones de euros) que permitirá ocho trenes diarios de los cuales 5 conectarán con el norte de Europa y tres con la Península Ibérica; 2023 es también la entrada en funcionamiento del Puerto Terminal Guadalajara-Marchamalo (15 millones de euros), que conectará el Puerto de Tarragona con uno de los hubs logísticos más importantes de la península.