Claroscuros del transporte valenciano
El empresario transportista valenciano está medio contento porque su gobierno regional ha retrasado el nuevo impuesto "céntimo sanitario" hasta julio.
Estará muy disgustado porque según su Cámara de Comercio, Valencia es una de las más afectadas por el peaje alemán. Y por último, abrigará un hálito de esperanza al conocer que la Generalitat Valenciana ha apostado por la construcción de 3 grandes zonas logísticas. Son los últimos "claroscuros" del sufrido sector del transporte terrestre. Vamos a analizar cada uno. El conseller de Economía, Gerardo Camps, ha anunciado recientemente el retraso hasta el segundo semestre de 2005 la puesta en marcha del impuesto sobre hidrocarburos o el famoso "céntimo sanitario" (iniciativa imitada al Gobierno madrileño). Esta decisión fue tomada en una reunión con los representantes de los transportistas: Confederación de Organizaciones Empresariales de la Comunidad Valenciana (Cierval) y la Federación Valenciana de Empresarios de Transporte (FVET). Dicho impuesto puede afectar a más de 24.000 vehículos con un coste de 6 millones de euros. Esta solución temporal de retrasar seis meses la aplicación del impuesto da la sensación que es como las compras en los grandes almacenes: "Adquiera su producto y no pague hasta dentro de seis meses". Lo que ocurre es que siempre que un consumidor hace un acto de compra se generan intereses. Lo de "no pague hasta seis meses después" es un arma comercial muy lejana de la verdad. Habría que preguntarse porqué un nuevo impuesto contra el transporte, antes que aplicarlo de forma indirecta o directa, a todo el cuerpo de consumidores. ¿Quizá por el escaso ruido de los transportistas en sus históricas quejas o por su débil representatividad dentro de la sociedad?.
Peaje alemán: Coste de 13,2 millones de euros para Valencia
Y tras estar medio contento por no pagar ahora el "céntimo sanitario" llega la Cámara de Comercio de Valencia y nos da el primer gran disgusto del 2005: "El peaje alemán para el conjunto de transportistas de la Comunidad Valenciana tendrá un coste de 13,2 millones de euros en el 2005". El sector de los cítricos y hortalizas será el más afectado, en concreto, durante el 2003 se exportaron a Alemania 683,4 millones de euros de frutas y hortalizas, es decir un 25% del total de exportaciones valencianas. Por cierto, 9 de cada 10 de dichas frutas y hortalizas se transportaron por carretera. La Cámara afina aún más y subraya un coste de casi 250 euros por desplazamiento en función del tipo de vehículo. El peaje alemán ha retrasado su puesta en marcha varios meses por cuestiones técnicas. ¿Se podría haber denunciado sus consecuencias en el transporte valenciano meses atrás?. ¿Se podría haber coordinado una respuesta del transporte español, por extensión, frente a Bruselas para frenar el dichoso peaje alemán?. El transportista valenciano (y el madrileño, andaluz, extremeño, catalán, gallego, etc.) ha quemado a estas alturas su calculadora porque ya los números no le salen: Subida espectacular del gasóleo, futuro impuesto del "céntimo sanitario", ahora el peaje alemán (y los que vengan, como el francés) subida de los seguros, etc. Los furibundos ataques contra el transporte terrestre semejan ya la lucha occidental contra el Tabaco.
Esperanza: 3 nuevas zonas logísticas
La Logística es el movimiento de mercancías e información desde el fabricante, hasta el consumidor final. Una cadena de suministros donde el transportista desempeña un papel protagonista por su condición de "puerta a puerta". Característica ausente en el transporte ferroviario, aéreo y marítimo. El presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, ha anunciado la construcción de tres grandes zonas logísticas, uno en cada provincia valenciana: Megaport Valencia-Sagunto y Parc Sagunt; Parc Castelló y el Puerto de Castellón y Aeropuerto de Altet e IFA (Institución Ferial Alicantina). Según el ejecutivo valenciano ofrecerá una cartera de servicios como recursos energéticos y de infraestructuras con el fin de que el corredor Mediterráneo sea el lugar idóneo para la implantación de proyectos relacionados con la nueva economía. De esta forma, se pretende impulsar la logística de distribución y la industria de las nuevas tecnologías, además del turismo de ocio y residencial. Estos 3 proyectos son ambiciosos y se debería conocer cuál es su coste y cómo se van a financiar. ¿Se darán exenciones fiscales para que vengan multinacionales?. Hay que recordar que en Cataluña se hizo esto y ahora por la "deslocalización global" numerosas compañías están abandonando esta región, vendiendo el terreno con un gran plusvalía y dejando sin trabajo a miles de familias. Es lo que hay.