Un sano ejercicio edificante es echar un vistazo de vez en cuando a las cifras que publican rigurosamente el Instituto Valenciano de Estadística (www.ive.es).

Los últimos datos de coyuntura (correspondientes al pasado mes de octubre) de Valencia respecto a España arrojan estas conclusiones. La producción industrial valenciana está aumentando a un ritmo del 1,2%, casi tres puntos por debajo del mismo dato a nivel nacional.

Las pernoctaciones hoteleras en Valencia crecen al 5,5%, de nuevo, casi tres puntos por debajo de la cifra nacional. Sin embargo, en el índice de comercio al por menor, Valencia registra un crecimiento del 3,8%, siete décimas más que en el resto de España. Una diferencia que se acentúa cuando nos referimos a la matriculación de vehículos de carga, Valencia alcanza un aumento del 2,2%, mientras que el resto de la Península cae casi un 3%.

Conclusiones: La industria valenciana está constipada, el turismo con pulmonía, el consumo se mantiene, y el sector logístico que utiliza vehículos de carga se muestra eufórico.

La Construcción ocupa a menos
Los anteriores indicadores de actividad económica que dibujan una fotografía de cómo estaban las economías mencionadas durante octubre se reflejan en otras variables. Por ejemplo, en el mercado de trabajo, Valencia crece en número de trabajadores activos un 3%, más de un punto porcentual que en el resto de las regiones. Pero si bajamos a la disgregación de los ocupados por sectores se observa que la Construcción está contratando a menos empleados, mientras que en el resto de comunidades se crece al 4%. Este dato es preocupante porque en cualquier economía desarrollada la construcción es uno de los motores que tiran para arriba o para abajo la riqueza regional. Lo mejor es que en número de parados la Construcción ha reducido su datos en un 26%, mientras que en España ha aumentado un 4,1%. Conclusión: Menos parados, pero el este sector hace menos contrataciones nuevas.

Los precios por las nubes
Tanto Valencia, como España registran el mismo dato de crecimiento de los precios: 3,6%, un mal dato que se ratificará el próximo 20 de enero cuando conozcamos el aumento total de los precios en el 2004. Una cifra que podría superar el 4%, dato que servirá para revalorizar pensiones, salarios, convenios sindicales, inversiones, etc. El IPC, o la inflación es, sin duda alguna, una de las cifras más importantes a tener en cuenta por los consumidores. Otro dato inquietante de la economía valenciana es que sus exportaciones caen un 1,4%, mientras que en España crecen un 12,7%. La exportación está íntimamente ligada a la actividad logística, si no se exporta, no se transporta mercancía, y la ley de la oferta y la demanda empieza a hacer de las suyas. El Puerto de Valencia seguro que ha notado este parón de las exportaciones valencianas, una situación que debería ser solventada prioritariamente por las administraciones públicas y privadas regionales. Al menos las importaciones están marchando prácticamente igual que las españolas a un ritmo del 15%. Y es que si queremos ser competitivos en la exportación, antes debemos crear un modelo de producción interesante para el mercado global en el que vivimos. Sólo así las exportaciones nos darán alegrías.

Manuel Carrillo es Director General de Atrium Media, Agencia de Comunicación Logística