El desgraciado y lamentable accidente en el que fallecieron dos profesionales del puerto, sea cual fuere la actividad que desarrollaran, ha puesto en entredicho las medidas de seguridad y de intervención inmediata en caso de accidente, tanto de los medios de rescate como de asistencia médica, que ya han recibido las críticas de algunos de los colectivos del puerto.

Está claro que cuando sucede una desgracia como la que ha sufrido la familia de los fallecidos y la portuaria, ya que a parte de disputas profesionales todos nos sentimos un colectivo, salen a la luz las deficiencias y carencias y la necesidad de contar con nuevos servicios e instrumentos de actuación que puedan evitar o minimizar la incidencia de los accidentes en las personas afectadas. De ahí el uso de una frase tan popular y recurrida en estos casos como “Nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena”, que tiene su importancia, ya que normalmente ayuda a tomar medidas o corregir errores para intentar evitar estos accidentes.

Desde hace varios años el tráfico marítimo ha venido aumentando considerablemente y, consecuentemente, la actividad portuaria. Hasta tal punto ha llegado la actividad en el puerto que se han desbordado todas las previsiones.

Esta hiperactividad ha motivado una gran concentración de profesionales en el recinto portuario, que, a pesar de las medidas de emergencia que ha implantado la APV en colaboración con las empresas, no impide que se produzcan circunstancias en las que los recursos asignados no son suficientes.

La caida de un vehículo al mar, con dos personas en su interior ha demostrado que todas las posibilidades de accidente no estaban previstas, por lo que ahora hay que volver a estudiar todas las circunstancias que pueden acontecer para que se produzca un accidente dentro del recinto portuario y establecer medios adecuados de intervención que permitan socorrer a los afectados en el menor tiempo posible y con los medios adecuados.

Me consta que tanto la APV como el cuerpo de bomberos, que cuenta con una Unidad de Intervención Inmediata dentro del puerto, concretamente en el Edificio Cocherón, como popularmente se conoce a estas instalaciones, están estudiando la ampliación de esta unidad con nuevos medios e instalaciones para intentar evitar estas desgracias.

En esta labor, y debido a la enorme población que día a día se da cita en el puerto de Valencia, se pretende implantar un servicio médico de 24 horas y una ambulancia de cuidados intensivos. Ahora falta esperar en cuanto tiempo se analizan estas necesidades y se adoptan las medidas oportunas para su implantación e intentar evitar nuevas desgracias.

En la actualidad es la Sociedad de Estiba y Desestiba del Puerto de Valencia (SEVASA) la que cuenta con una ambulancia y un equipo médico para atender posibles accidentes en las operaciones de estiba y poder hacer frente a incidentes de este tipo.