La compañía Kalmar, que forma parte del grupo Cargotec, ha obtenido un contrato pata automatizar dos grúas RTG de las terminal noruega Borg Havn IKS, mejorando tanto su productividad como su sostenibilidad. El contrato incluye también labores de mantenimiento y de automatización de software. Se espera que el proyecto esté terminado a final de año.

Borh Havn es una terminal marítima ubicada en Fredrikstad, en el sudeste de Noruega, y tiene una capacidad anual de aproximadamente 150.000 TEUs.

Este acuerdo con Kalmar encaja en la línea de trabajo de la autoridad portuaria, que aspira a impulsar tanto la sostenibilidad como la adoptación de tecnologías modernas de automatización en sus instalaciones.

Con el propósito de extender la capacidad de la terminal e incrementar la densidad del almacenaje, Borg Havn ha tomado la decisión de abandonar su modo actual de trabajo centrado en ‘reachstackers’ e implementar RTG controladas remotamente para gestionar el movimiento de contenedores.

Este proyecto de remodelación incluye actualizar las dos grúas, operadas manualmente, y convertirlas en dos AutoRTGs de Kalmar, que cuentan con soluciones software y hardware así como con fibra óptica que favorece la comunicación y el intercambio de datos.

Kalmar también equipará ambas máquinas con una solución de conducción guiada por láser y suministrará al cliente dos mesas de control para dirigir ambas grúas móviles.

“En colaboración con Kalmar, hemos establecido una solución técnica apropiada para actualizar nuestras RTG. Nuestro objetivo es lograr que las grúas alcancen un estado técnico que facilite unas operaciones remotas. El trabajo realizado hasta la fecha es muy prometedor y estamos seguros de que el resultado final será muy satisfactorio”, indicó el gerente técnico de Borg Havn IKS, Pal-Erling Johnsen.

Según el director de Automation Retrofits de Kalmar, Miikkla Haapa-aho, este proyecto es un ejemplo excelente de cómo la empresa puede emplear su amplia competencia técnica y sus conocimientos para reconvertir equipamiento antiguo, diseñado originariamente para ser operado a mano.

“Este tipo de reconversión demuestra que es posible que terminales de todos los tamaños inicien su fase de automatización sin realizar cambios drásticos en sus infraestructuras”, agregó.