La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha elaborado un informe acerca de la evolución del transporte ferroviario de mecancías en España a lo largo del año 2015. En este documento, la CNMC muestra su confianza en que, dada la estructura económica de España y la evolución reciente del mercado, es posible que el sector ferroviario pueda crecer para alcanzar una cuota modal más acorde con la que registran el resto de países europeos. Sin embargo, considera que esta cuota no alcanzará la media de la Unión Europea.

Y es que, a pesar de las iniciativas públicas y privadas dirigidas a fomentar el transporte ferroviario de mercancías en España, lo cierto es que la evolución de la cuota modal del tren muestra un estancamiento en los últimos años en la mayoría de países europeos, con una media del 18% en el año 2014, el último dato conocido publicado por Eurostat.

En el caso de España, la cuota es una de las más bajas de la Unión Europea, con un 2,2% en toneladas netas y un 5% en toneladas/kilómetro, superando sólo a países con una extensión mucho más reducida o con carácter insular, como Holanda, Luxemburgo, Grecia e Irlanda.

Para competencia entre los factores que influyen en el bajo nivel de desarrollo del transporte ferroviario de mercancías en España destacan los estructurales, como es el caso de su posición geográfica, de gestión, tanto de las infraestructuras como del propio transporte, o el tratamiento del resto de modos. A estos factores se suman otros que contribuyen a limitar la competitividad del tren y que explican que la carretera capte tráficos en los que el ferrocarril podría ganar la mano por peso y distancia. Además, en esta realidad influye de forma determinante la decisión de Renfe Mercancías, que convive en el mercado junto a otros ocho operadores, que han ido irrumpiendo en el transporte de mercancías desde que éste se liberalizara en 2007, de eliminar la modalidad de transporte de vagón disperso. Esta modalidad permitía a los clientes facturar uno o varios vagones, que, posteriormente, son agrupados en un convoy hacia el destino definitivo. En los países con mayor tráfico de mercancías por ferrocarril esta moddalidad representa hasta el 27% del total de toneladas transportadas, aunque lo cierto es que en los últimos años el volumen se ha reducido notablemente.

Por su parte, los nuevos operadores del mecado español han ido incorporando esta modalidad a sus ofertas, pero no han podido contrarrestar la caída que representó la decisión de Renfe Mercancías.

Tráfico internacional
El tráfico internacional es uno de los nichos en los que el modo ferroviario podría ser más competitivo, debido a las largas distancias que supone. Sin embargo, en el caso de España el tráfico internacional es relativamente reducido sobre el total del mercado, con apenas el 17% de las toneladas netas totales transportadas.

En estos resultados influye el componente geográfico, que limita el crecimiento de este tráfico de mercancías. Así, por una parte, la situación periférica de la Península limita los tráficos portuarios con destinos interiores, al contrario de lo que sucede en países centrales.