El grupo chileno Ultramar –un peso pesado de los negocios logísticos de Sudamérica y al que pertenece el operador TPS de Valparaíso - concretó finalmente la compra del 30% de las acciones clase A de Terminal Puerto Rosario S.A (TPR). Su desembarco, además de disparar una millonaria inversión en dólares para la infraestructura portuaria, significa la llegada de un operador internacional –que sólo en servicios factura 3.000 millones de dólares al año- con el conocimiento necesario para hacer llevar a las grandes ligas los negocios de las concesionarios I y II del puerto local.

El presidente de TPR, Carlos Bello, y el director de la empresa y referente de Vicentín, Gustavo Nardelli, explicaron los detalles del acuerdoque fue rubricado por ambas partes hace 15 días.

Además, ya se iniciaron los trámites formales de validación en el Ente Administrador del Puerto Rosario (Enapro).

De hecho no es nuevo el interés por el puerto de Rosario del grupo Ultramar -uno de los principales grupos empresarios chilenos e indiscutido referente portuario con participación accionaria en ocho puertos (incluido el de Montevideo en Uruguay) y operaciones logísticas en 20 terminales a lo largo de toda la costa del país trasandino.

En concreto las acciones que se vendieron fueron las de la sociedad española InterRosario Port Services, empresa que tenía ese 30% de las clase A, que según el pliego de concesión de 2002 debían ser las del “operador portuario”.

En el momento de la licitación TPR era un conglomerado de inversores locales conducidos por Guillermo Salazar Boero con el 70%, tal como ha informado el grupo.