La compañía de Emiratos Árabes Unidos, con sede en Dubai, DP World, ha decidido renunciar a los recursos de la firma P&O en Estados Unidos y transferirlas a otra firma con origen en el propio país, después de que varios senadores demócratas y republicanos expresaron su preocupación sobre que una empresa de un país árabe controlara varios puertos importantes de EE.UU., debido a la amenaza de terrorismo.

“Debido a la sólida relación entre Emiratos Árabes Unidos y Estados Unidos y, con el fin de preservar dicha relación, DP World transferirá las operaciones de P&O en Norteamérica a una entidad de este país”, según aseguró en un comunicado el director de DP World, Edward H. Bilkey.

Uno de los representantes críticos con la adquisición de la firma británico P&O Ports por parte de Dubai Ports World, el republicano Peter King, se ha mostrado satisfecho con esta decisión pero ha añadido que la empresa elegida para gestionar terminales en puertos de este país “no debe tener vínculo alguno con DP World”.

Por otra parte, el Tribunal Supremo de Inglaterra y la Corte de Apelación de este país han desestimado los recursos presentados por la firma estibadora Eller&Co y de dos accionistas particulares de P&O que se oponían a la adquisición de esta compañía por parte de DP World.

Peninsular & Oriental Steam Navigation (P&O) aceptó la propuesta de compra de DP World por valor de 6.800 millones de dólares hace tres meses y ambas firmas esperan que el proceso de adquisición esté terminado dentro de los plazos previstos, una vez se reciban los permisos correspondientes.

Royal P&O Nedlloyd, del mismo grupo, fue integrada el mes pasado en el grupo A.P. Moller en la compañía Maersk Line, que cuenta con delegación propia en el puerto de Valencia.