Los estibadores portugueses acaban de llegar a un acuerdo con la Autoridad Portuaria de Singapur (PSA) por el que la propietaria de la terminal de Sines se compromete a no forzar a sus trabajadores a realizar trabajos de estiba.

Es decir, se compromete a no "fabricar" internamente estibadores, una posibilidad que quedaba acierta en el acuerdo obtenido con el Sindicato XXI, una organización sindical impulsada apresuradamente por PSA para obtener el control de los trabajadores de la terminal.

Comunicado
Según un comunicado enviado por la International Dockworkers Council (IDC), afirma que "el éxito de los trabajadores portuarios lusos sólo ha sido posible a partir de la capacidad de movilización demostrada en los numerosos paros y huelgas que han ido convocando desde el pasado mes de junio. Únicamente la postura firme y decidida de los trabajadores ha forzado a la empresa de negociar, en un proceso que se plasmó el pasado 3 de agosto en el acuerdo alcanzado entre ambas partes.

Los trabajadores sin embargo, manifiestan su voluntad de permanecer atentos ante cualquier posible violación del acuerdo por parte de PSA. Por su parte, la compañía asiática también se ha comprometido a no efectuar ninguna represalia sobre los trabajadores que han participado en las diferentes huelgas, tal como había hecho en anteriores ocasiones".

Apoyo
El comunicado sigue: "Los portuarios portugueses, un colectivo que agrupa a cerca de mil trabajadores, se sienten muy satisfechos con el apoyo recibido desde el exterior. Integrados en el Consejo Internacional de Estibadores (IDC), los estibadores lusos han visto cómo se repetían las muestras de apoyo de un colectivo que en el último año ha logrado notables éxitos en su defensa del sector".

"El apoyo prestado por los sindicatos afiliados al IDC a sus compañeros portugueses contrasta con la actitud adoptada por CC.OO. y UGT, que, en el puerto de Vigo, se negaron a dar cobertura a la huelga de los trabajadores portugueses. Sin embargo, y a pesar de este tipo de actitudes, los estibadores portugueses y sus compañeros del IDC han logrado una sonada victoria frente a una de las compañías navieras más importantes, lo que fortalece la estrategia sindical de esta organización internacional, convertida, en apenas cuatro años, en la principal voz de los trabajadores en el mundo", continua este comunicado, que concluye señalando que "Ahora, en Portugal se abre una nueva etapa que tendrá que estar marcada por el respeto de la legalidad y los derechos de los trabajadores.

De hecho, el proceso de negociación de un nuevo "acuerdo de empresa" dará comienzo en Sines antes de fin de septiembre, con lo que los trabajadores esperan superar definitivamente las diferencias que han ido surgiendo con PSA durante todo este tiempo".