La naviera Kawasaki Kisen Kaisha (‘K’ Line) obtuvo en el primer trimestre de su ejercicio fiscal unas ganancias de 76,1 millones de dólares, una mejora sustancial con respecto a sus resultados de mismo periodo del año pasado, en que cosechó número rojos.

Uno de los buques de la naviera japonesa en el puerto de Valencia

Sus beneficios de explotación también se recuperaron de las pérdidas de 2016 al alcanzar la cifra de 34,6 millones de dólares. Entre abril y junio, los ingresos del grupo japonés se situaron en 2.565,9 millones de dólares, lo que supuso una mejora interanual del 14,7%.

Según la compañía, en el segmento del tráfico de contenedores, las tarifas mejoraron tras alcanzar mínimos históricos, lo que ha mejorado las condiciones de los contratos a medio y largo plazo, aunque todavía falta comprobar los efectos que tendrán en el sector las recientes fusiones e integraciones de navieras.

En el caso de los graneles sólidos, se mantiene la senda de recuperación en un momento en que la naviera continúa trabajando por mejorar la eficiencia de la operativa de sus buques y por recortar costes.

En cuanto al movimiento de vehículos, según ‘K’ Line, persiste un cierto nivel de incertidumbre en países de Oriente Medio y en Rusia. Por su parte, el grupo seguirá trabajando por asegurar una vía estable de ingresos en el segmento del gas natural licuado (LNG).

La naviera prevé cerrar su actual ejercicio fiscal con unas ganancias de 189 millones de dólares, unos beneficios de explotación de 207 millones de dólares y con unos ingresos operativos de 10.141 millones de dólares.

La naviera japonesa ‘K’ Line cuenta con oficinas en España.