Asimismo, su resultado neto de explotación (EBIT) retrocedió un 32% hasta los 16,46 millones de dólares mientras que sus ingresos bajaron un 9% interanual hasta los 1.282,28 millones de dólares.

La División de Air Freight expermientó un notable crecimiento

El beneficio bruto se situó en 334 millones de dólares y el resultado bruto de explotación (EBITDA) en 27,2 millones de dólares, lo que suponen sendos descensos del 8,8% y el 25,1%, respectivamente.

“En los tres primeros meses del año, logramos superar la media del mercado con incrementos de los volúmenes de tráfico del 8% en caso de la carga aérea y del 7% en las mercancías marítimas. Según preveíamos, los márgenes de beneficio estuvieron sometidos a presión. Sin embargo, se van recuperando lentamente desde que experimentamos un repunte en la rentabilidad por unidad tanto en Airfreight como en Oceanfreight con respecto al último trimestre de 2016”, manifestó el director ejecutivo de Panalpina, Stefan Karlen.

El crecimiento experimentado por el tráfico aéreo se vio impulsado principalmente por las rutas con Extremo Oriente mientras que los movimientos trasatlánticos y con el continente asiático impulsaron la división de tráfico marítimo, a pesar de los beneficios netos por TEU descendieron un 17% con respecto al primer trimestre del año pasado.

Perspectivas
“A pesar de que se espera que las difíciles dinámicas de mercado continúen a lo largo de 2017, estamos bien posicionados y somos cautamente optimistas de que podemos mantener este sólido crecimiento de volumen de mercancías tanto en Airfreight como en Oceanfreight, mejorando aún más nuestra cuota de mercado. En un mercado en el que las tarifas están creciendo en lugar de descender, como ocurría el año pasado, esperamos también avanzar en lo relativo a la gestión. Una de nuestras prioridades sigue siendo, por supuesto, restaurar la rentabilidad del Oceanfreight”, concluyó Karlen.