La naviera Kawasaki Kisen Kaisha (“K” Line) registró en los primeros tres meses de su ejercicio fiscal unos beneficios netos de 83 millones de dólares, más del doble que en los meses de abril, mayo y junio del año anterior.

En ese primer trimestre, la compañía japonesa mejoró sus ingresos un 5% hasta los 2.739 millones de dólares al tiempo que sus ganancias operativas se situaron en 91,82 millones de dólares, un 16% más que en el mismo periodo de 2014.

Según la compañía, durante esos tres meses, la economía global mantuvo una “recuperación gradual” pese a que sigue habiendo “cierta preocupación” con respecto a algunas regiones. En concreto, Brasil, Indonesia y Sudáfrica experimentaron estancamientos económicos al tiempo que China ralentizó su nivel de crecimiento.

En el caso del transporte marítimo, “K” Line aludió a algunos “factores negativos”, entre ellos el deterioro de las condiciones del mercado en el caso del movimiento de contenedores y de graneles sólidos. Según la compañía, su volumen global de carga en los meses de abril, mayo y junio descendió un 3% como consecuencia del descenso de la demanda provocado por la “incertidumbre acerca de las tendencias de consumo”.

Mejora
No obstante, gracias al programa de velocidad reducida y a otras medidas de ahorro de costes, unidas a la recuperación del mercado de los graneles líquidos, a la depreciación del petróleo y la bajada del precio del petróleo, la naviera nipona logró mejorar sus resultados operativos.

La naviera japonesa “K” Line cuenta con oficias en España.