Desde el pasado 1 de enero la Unión Europea ha puesto en marcha el primer mercado internacional de derechos de emisión de CO2, una bolsa destinada a que las empresas incluidas en los Estados miembros puedan reducir, al menor coste posible sus emisiones de CO2.

Este espacio servirá para que las empresas que excedan las emisiones máximas permitidas puedan acudir a él para comprar.

En el caso español, son 928 las empresas afectadas que ya tienen asignada su cuota anual de CO2, por lo que si lo exceden tendrán que acudir a este mercado que está compuesto por las empresas que no han consumido toda su cuota, por lo que podrán vender las emisiones que no han realizado. Con este método se beneficiarán las empresas europeas que han aplicado tecnología limpia y descontaminante a sus producciones.

Además, este mecanismo también permitirá llevar a cabo el Protocolo de Kioto y lograr que las industrias cumplan más fácilmente el mismo y reduzcan las emisiones que producen el efecto invernadero.

Este protocolo incidirá hasta el 2007 en las industrias que emiten este gas, como son la siderúrgia, el cemento, la cerámica o el papel, pero a partir de este año se ampliará a más sectores y más gases.