La naviera Kawasaki Kisen Kaisha (“K” Line) ha acordado con la compañía Tokyo Gas investigar el transporte marítimo de dióxido de carbono (CO2) con el fin de establecer una cadena de captura y almacenaje (CCS).

El Gobierno japonés considera que la cadena de CCS será uno de los métodos relevantes para lograr la neutralidad de carbono del país y aspira a favorecer el almacenaje de entre 120 y 240 millones de toneladas CO2 hasta 2050.

Ambas compañías desarrollarán una simulación de transporte de CO2 licuado generado en el área metropolitana de Tokio hasta puntos de almacenaje en Japón y en la región de Asia - Pacífico.

Estudiarán la eficiencia económica y las operaciones necesarias para transportar esta mercancía por vía marítima.

Desde “K” Line, promueven una variedad de iniciativas para limitar las emisiones de sus operaciones, de ahí que aspiren a poner en marcha el año que viene una cadena completa de captura, transporte y almacenaje de CO2.