Los trabajadores portuarios paralizan el puerto de Rotterdam durante 24 horas
Rotterdam, la ciudad que protagonizó junto a Barcelona las colosales manifestaciones portuarias contra la Directiva Europea en septiembre de 2003, ha vuelto a ser el escenario de una nueva protesta social.
En esta ocasión, han sido 24 horas de paro del principal puerto de Europa para demostrar la frontal oposición de los trabajadores a los planes de reforma de la seguridad social y del sistema de pensiones que pretende imponer el conservador primer ministro holandés, Jan Peter Balkenende, del Partido Democristiano (CDA).
Según señala el Consejo Internacional de Estibadores (IDC), la beligerancia de los 5.000 trabajadores portuarios de Rotterdam contra los planes de reforma del sistema público de pensiones y Seguridad Social se explica por los constantes ataques que han sufrido en los últimos años.
El bloqueo del principal puerto de Europa en volumen de tráfico fue posible durante 24 horas por el apoyo que brindaron los portuarios a los 40.000 manifestantes que recorrieron las calles de Rotterdam para mostrar su oposición a la política del conservador Peter Balkenende. Los planes del Gobierno pretenden recortar las prestaciones sociales en un país en que estas conquistas eran consideradas hasta hace poco intocables.
Asimismo, los trabajadores portuarios holandeses, que volverán a bloquear el puerto el próximo 27 de septiembre, se oponen también a los planes de reforma del sistema portuario europeo, expresados nuevamente por la actual comisaria de Transportes, la conservadora Loyola de Palacio, según señala el Consejo Internacional de Estibadores.
El IDC
La comisaria, que abandona el cargo dentro de un mes, ha vuelto a coquetear con conceptos como la “autoasistencia”, una práctica rechazada de plano por los portuarios y que en 2003 movilizó a todo el sector hasta conseguir la derrota de la Directiva Europea en el Parlamento de Estrasburgo.
La “autoasistencia” permitiría a las navieras prescindir de los trabajadores portuarios profesionales y frente a ella se han posicionado tanto los portuarios holandeses como el Consejo Internacional de Estibadores (IDC), que aglutina en la actualidad a más de 60.000 trabajadores portuarios en todo el mundo.