¿Cuáles son en estos momentos las prioridades de la compañía?
En la actual situación de crisis sanitaria, económica y social, en Baleària tenemos dos prioridades irrenunciables. La primera pasa por preservar la caja y resistir frente a una caída de más 70% de los ingresos. La segunda, mantener el ánimo y la cohesión del 100% de nuestras plantillas.

Adolfo Utor (Foto Baleària)

¿Cómo han respondido los trabajadores ante el ERTE?
Tengo que resaltar con satisfacción que los equipos están respondiendo con un compromiso incondicional. En estos momentos de dificultad extrema sentimos el calor y el apoyo de todas las plantillas y estamos empeñados en corresponder a esta implicación. Son momentos de incertidumbre y dificultad y somos conscientes de la importancia de estar alineados en los mismos objetivos, el primero, con toda la sociedad, derrotar a la cadena de contagio, y el segundo, superar la crisis económica. Para ambos objetivos es fundamental contar con equipos comprometidos, mantener una estrecha comunicación, y basar nuestras relaciones en la trasparencia y en la mutua confianza. Creo que lo estamos consiguiendo y estoy muy orgulloso de contar con estas plantillas.

¿Qué servicios continúa prestando la compañía?
Las restricciones al transporte de pasajeros por parte del Gobierno en todas nuestras líneas, y la caída de la demanda de carga como consecuencia de las restricciones a la actividad económica, nos han obligado a minimizar nuestra oferta de servicios de forma drástica. En estos momentos solo mantenemos servicios para garantizar las necesidades esenciales de suministro de bienes de primera necesidad. De una flota de 32 barcos solo 12 se encuentran operativos. Estos servicios se están manteniendo con importantes pérdidas para la empresa, pero asumimos la responsabilidad de cumplir con nuestro compromiso social, y esperamos que los responsables públicos correspondan a nuestro esfuerzo con algo más que buenas palabras y felicitaciones.

¿Qué acciones realiza Baleària para mantener informados a sus públicos de interés?
Mantenemos una comunicación muy intensa con todos nuestros grupos de interés. Con nuestros proveedores, que también pasan por dificultades, especialmente las agencias de viajes, talleres, suministradores y astilleros. Con nuestros clientes de carga, atendiendo sus necesidades, y compartiendo nuestra responsabilidad de garantizar la cadena de suministro.

Con nuestros clientes de pasaje, por los canales digitales habituales y habilitando canales especiales que respondan a sus dudas y necesidades. Y también con las Administraciones públicas y medios de comunicación, con los que mantenemos una comunicación permanente y cooperativa. Las herramientas tecnológicas y las magníficas infraestructuras de comunicación digital de nuestro país han permitido garantizar canales de comunicación eficientes y fluidos.

¿Se recuperarán todos los empleos?
En la medida en que la situación económica se vea normalizada, y la movilidad alcance los niveles anteriores a la crisis sanitaria, confiamos en pasar esta crisis sin bajas, manteniendo nuestra capacidad de crecimiento. La incertidumbre se encuentra en la profundidad de la recesión que esta crisis va a provocar y en los plazos necesarios para recuperar la normalidad.

Son preguntas difíciles de contestar. Nosotros estamos trabajando muy duro, manteniendo la cohesión de nuestras plantillas, preparando nuestros equipos comerciales, profundizando en el proceso de digitalización y adaptando nuestra organización de tierra y flota a la nueva realidad. Desde esta posición tenemos la certeza de que seremos más competitivos y la esperanza de no solo mantener, si no también seguir generando empleo. Como en todas las crisis también se nos abre un horizonte de oportunidades.

¿Qué escenario prevé a corto plazo?
El escenario a corto plazo es complejo. El primer objetivo es superar la crisis sanitaria, que todavía tiene recorrido. El peligro de colapso del sistema sanitario parece superado y ahora nos encontramos en una meseta, pero todavía no tenemos fecha para el levantamiento de las restricciones a la movilidad. El 55% de nuestros ingresos provienen de los pasajeros, residentes, nacionales, e internacionales. Nuestra recuperación depende de la normalización de la movilidad. Los escenarios más optimistas contemplan un aumento progresivo de a movilidad a partir del levantamiento del confinamiento, que puede tener su punto final el mes de diciembre, sin llegar a alcanzar los niveles del año pasado. Nos va a tocar sufrir y mucho.

¿Qué debe hacer la Administración Pública en relación al tráfico de pasajeros?
Si tenemos en cuenta el carácter estratégico y esencial de nuestros servicios marítimos, las administraciones públicas van a tener que afrontar nuestras necesidades. Acreditan una gran preocupación por el sector aéreo y una disposición manifiesta a responder a sus necesidades.

Se equivocarán si no dan el mismo trato a un sector estratégico y esencial, como el del transporte marítimo de pasajeros, con más de 25 millones de personas que pasan por nuestros puertos.

Reajustes
El ERTE presentado por Baleària recientemente, que afecta a 544 empleados, es decir, el 30% de la plantilla, ha sido definido como un modelo de “buen hacer” por los sindicatos consultados por este diario. “Los reajustes son necesarios, no cabe duda. Pero se pueden hacer bien o mal. Vamos a seguir de cerca todos los procesos para que nadie se aproveche de la coyuntura para proceder a más despidos de los necesarios. En este sentido, Baleària ha introducido medidas compensatorias para la plantilla que hay que resaltar en positivo”, afirman. Entre ellas, complementar la retribución salarial bruta durante el mes de abril a los empleados afectados. La medida, que comunicó el presidente a todos los trabajadores de la compañía, se tomó por la caída de ingresos, de hasta el 70 por ciento, y por la caída de tráfico. Así, de los 32 barcos que posee la compañía, 20 continúan sin actividad (con tripulaciones mínimas de seguridad) y los 12 restantes operan con tripulaciones reducidas al transportar solo mercancías.

La semana pasada la naviera presentó los resultados económicos correspondientes al ejercicio de 2019. Para "fortalecer la situación de la empresa frente a la crisis sanitaria, ha renunciado al cobro de del dividendo por parte de sus accionistas", señala el informe económico. El volumen de mercancías transportadas se situó en 6.111.000 metros lineales de carga, un 5% más que en el ejercicio anterior. El 75% de la carga es imputable a las rutas con Baleares, donde el transporte marítimo resulta clave para el abastecimiento de productos esenciales. El pasaje, que representó un 55% de la facturación total de la empresa en 2019, creció un 3%. En 2019 fueron 4.480.000 los pasajeros que embarcaron en alguno de los 30 buques de la compañía marítima radicada en Dénia, que transportó 1.064.000 vehículos.