La compañía Baleària va a presentar un ERTE, según ha podido confirmar Valencia Marítima. La firma pretende con esta medida “superar la crisis y mantener los empleos". En la actualidad, los responsables de la compañía estudian el alcance de la medida y a qué parte de la plantilla afectará. La empresa anuncia, a través de un comunicado interno, que los tripulantes de todos los barcos embarcados y los trabajadores de operaciones y esenciales con actividad presencial, no se someterán a ningún ajuste. Sin embargo, los trabajadores que puedan continuar realizando teletrabajo y con una actividad justificada, sí se verán afectados a un ERTE a tiempo parcial. Por su parte, los tripulantes y trabajadores en territorio nacional cuya actividad quede reducida totalmente serán sometidos a un ERTE de 100%. Por lo que respecta a los trabajadores de buques y territorios no nacionales, también se verán afectados por la regulación.

La firma, según el documento, justifica la decisión por la caída de ingresos en las dos últimas semanas, por encima del 70%, y a la restricción del transporte de pasajeros en todas las líneas; a la bajada de la demanda de transporte de carga por encima del 30%; a la desaparición de las ventas de futuro, y a la anulación de las ventas anticipadas.

En el citado documento, la naviera destaca el esfuerzo que realiza toda la plantilla para seguir haciendo posible cumplir con su responsabilidad como suministradores de transporte marítimo, en unos momentos tan difíciles. Compromiso que merece la gratitud de toda la sociedad y que Baleària- asegura - encontrará la forma de recompensar. La compañía destaca su situación de liderazgo en el sector y confía en mantener la cohesión de la plantilla para superar la actual situación de crisis, seguir facilitando el libre comercio marítimo y la libre circulación de las personas. La compañía ya ha informado a los trabajadores de la medida y tiene previsto ponerla en marcha a lo largo de los próximos días.

Falta de actividad
Junto a Baleària, al menos cinco firrmas transitarías de ámbito nacional con delegación en el puerto de Valencia negocian en la actualidad la presentación de un ERTE. De ellas, tres operan en los tres recintos valencianos y solo una en Alicante. El total de trabajadores afectados se estima en 400 en la Comunidad Valenciana, de los que 325 pertenecen a la provincia de Valencia. Así lo han confirmado a este diario fuentes de una de las citadas compañías. Se trata de empresas que, además, prestan servicios de consignación.

Las transitarias aducen falta de actividad en el recinto valenciano para solicitar el ERTE, especialmente señalan "por la bajada de tráficos a los que se dedica en su operativa diaria y que se ha visto muy afectada". Además de estas empresas, los ERTES también han aumentado en los clubes marítimos y las cofradías de pesca. En la actualidad, los sindicatos estudian e informan a las plantillas sobre las condiciones para plantear una regulación temporal y, sobre todo, negociar los expedientes para que el número de trabajadores empleados sea el menor posible. Posteriormente se abre un período de negociación entre las partes. El último paso es la tramitación oficial para su aprobación o denegación por parte de la autoridad laboral. Se da la circunstancia que estos expedientes de regulación en las transitarias se iniciaron antes del pasado 27 de marzo, fecha en la que Gobierno prohíbe los ERTES en los sectores esenciales

Por tanto, se desconoce todavía si serán viables.

Por su parte, los sindicatos mayoritarios del sector, CC.OO y UGT, trabajan estos días en la recopilación de información para tramitar los ERTES. Para Francisco J. Martínez Guillén , responsable de Sector del Mar CC.OO, "en nuestro sector, a pesar de ser decisivo en la cadena logística, con un mantenimiento de las exportaciones e importaciones, de los movimientos de mercancía, con un número de tráficos portuarios similares a periodos anteriores a la crisis, y en muchos casos, incluso con repunte de la actividad y de escalas, va a verse afectado una parte importante de las plantillas de distintas empresas con la petición de iniciación del proceso de ERTES".

En su opinión, "se espera una cascada de solicitudes de ERTES de fuerza mayor por la falta de seguridad y de demanda, según indica la patronal de productos frescos. También hay que recordar algunos de los despidos se han producido en empresas de acuicultura en la provincia de Valencia el mismo día de la declaración del estado de alarma", añade.

Para el delegado sindical, ante las dificultades económicas que estamos sufriendo es necesario garantizar los salarios y la recuperación del empleo. "Para ello debemos utilizar todos los mecanismos que tenemos a nuestro disposición, con la legislación actual y, sobre todo, apelando a la responsabilidad que hemos demostrado los representantes de los trabadores y trabajadoras. Solicitamos lo mismo a la parte empresarial, instando a minimizar el impacto que puede suponer la aplicación de estas medidas, actuando conjuntamente con solidaridad y concienciación y para que entre todos/as podamos superar las adversidades que vamos a sufrir en los próximos meses. Se trata de que no se puedan aprovechar de la precariedad de las personas más vulnerables”.

Toda la comunidad portuaria, (estiba, terminales, mantenimiento, transitarias, aduanas, operadores de carga y descarga, consignatarias, autoridad portuaria, Salvamento Marítimo, tráfico marítimo, pesca, acuicultura, transporte, centros logísticos, “sigue al frente de la actividad, exponiéndose a un alto riesgo de contagio, comprometidos con la sociedad, mejorando la gestión, la distribución, la comunicación, y el transporte. Necesitamos una vez más, poner en valor y hacer un reconocimiento para todos los que sustentan y garantizan una vida digna y que podamos mantener una aparente normalidad mientras estamos confinados, en unas condiciones mínimas, pero con los productos básicos necesarios y el material imprescindible para garantizar la salud de las personas", añade.

Baleària facilita el traslado a más de 300 personas desde Marruecos a Francia
Baleària ha realizado un viaje excepcional entre Tánger-Med y la localidad francesa de Sète (en el sur del país galo) para facilitar el traslado a Francia a unas 200 caravanas y sus 326 ocupantes, que se encontraban en Marruecos cuando se inició la crisis sanitaria causada por el Covid-19. Todos ellos son ciudadanos con pasaporte comunitario europeo, la mayoría son franceses, pero también han viajado suizos, alemanes e italianos, entre otras nacionalidades, que no podían salir del país a causa de las restricciones actuales.

El buque Nápoles salió de Tánger-Med el domingo 29 y ha llegado a Francia hoy por la mañana, en una operación, que ha sido coordinada con los gobiernos de Marruecos y Francia y en la que también ha participado la UE. Además, está previsto un segundo viaje igual este jueves 2 de abril para trasladar de regreso a sus países a los turistas que siguen en territorio marroquí. El buque saldrá del mismo puerto y llegará al puerto de Sète el viernes.

Teniendo en cuenta el contexto actual, la naviera ha seguido todos los protocolos de seguridad e higiene antes y durante el viaje como, por ejemplo, medir la temperatura a todos los pasajeros antes de embarcar y desinfectar todos los vehículos antes de entrar en la bodega del buque. Además, a bordo viajaba personal sanitario.

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Francia, y los embajadores de Francia y España en Marruecos han agradecido a la compañía su importante papel en el traslado de estas personas.