Con la instalación de dos nuevos tramos de barreras anticontaminación, el puerto de Alicante ha concluido la II Fase de la puesta en marcha de pantallas cortavientos en la zona de operativas con graneles sólidos sin instalación especial (Muelle 17).

El Muelle 17 es el destinado a la recepción y manipulado de graneles sólidos

La actuación ejecutada en el presente proyecto consta de dos nuevos tramos de pantallas compuestas por 24 módulos, de 12 metros de altura, cuya longitud total alcanza los 150 metros. Debido a que están formadas por módulos independientes, según las necesidades de explotación, se podrán colocar de una manera u otra y así impedir que las corrientes de aire arrastren las partículas hacia la parte exterior del muelle.

Otras mejoras implementadas también en esta segunda fase con la ampliación y mejora del sistema medioambiental de alerta, así como la adecuación del drenaje del Muelle 17. Una vez finalizada esta segunda fase, los 320 metros de perímetro del Muelle 17 han quedado protegidos con barreras cortavientos semipermeables. La adopción de esta medida correctora, recomendad por la Unión Europea, para evitar el arrastre no deseado de polvo hacia otras zonas resulta sumamente efectiva, ya que, las pantallas modifican la velocidad y la turbulencia del viento, estableciendo una zona de corriente más o menos remansada donde tanto la velocidad media del viento como las turbulencias son menores que las del viento incidente.

El innovador sistema de alerta medioambiental, que permite la detección automática de las operativas cuando el viento que sopla en dirección hacia la ciudad supera los 8 m/s, también ha sido mejorado con dos paneles visualizadores color rojo sujetos a la parte alta de la estructura y orientados hacia el mar. En estos paneles se podrá leer el mensaje “Detener Operativa” cuando el sistema de alerta se active. Además, se han instalado seis balizas de color rojo, las cuales también se podrán en funcionamiento cuando se active el sistema de altera.

Con el próposito de alcanzar un equilibrio entre el puerto y el entorno, el enclave impulsó en febrero de 2099 un Plan de Integración Urbana.