El pasado 24 de octubre, el Ayuntamiento de Altea aprobaba por unanimidad una moción de urgencia para la actual situación del Club Náutico de la localidad alicantina.

El objetivo, el mismo que reclaman tanto profesionales de los deportes náuticos como la mayoría de ciudadanos del municipio, es que se renueve la concesión de las instalaciones portuarias en favor del Club, que expiró en septiembre de 2000.

Esta iniciativa cuenta con un total respaldo institucional puesto que la moción se ha consensuado en el Ayuntamiento por los portavoces de los cuatro partidos políticos que integran esta Corporación Municipal, y que son Verónica López, del PSPV-PSOE, Jaime Sellés, del PP, Pepa Narbó, del BLOC y Carolina Punset, en representación de Ciudadanos por Altea.

El Ayuntamiento de Altea ha decidido apoyar a una entidad sin ánimo de lucro para que mantenga su actividad y su gestión. Para ello, la Conselleria de Infraestructuras debería cambiar el pliego de condiciones del concurso para la adjudicación, puesto que valoran más los criterios economicistas que los sociales, deportivos y medioambientales. El Ayuntamiento solicita pues el cambio de las bases para potenciar “el factor deportivo, social y medioambiental y disminuir la importancia del factor económico, sin perjudicar los intereses generales y públicos que se obtendrán con el canon de la concesión que se deberá invertir íntegramente el en pueblo”.

El presidente del Club, José Román Zurutuza, ha destacado que la moción se acuerde por unanimidad, pues significa que en adelante “trabajaremos todos juntos para alcanzar una solución óptima”.

Un parón de siete años
La concesión administrativa que concedió el Estado al Club Náutico de Altea finalizó en septiembre de 2000. Desde entonces, las instalaciones han funcionado con renovaciones semestrales hasta septiembre de 2006, cuando la Conselleria comunicó que se harían mensuales, lo que generó incertidumbre entre los trabajadores y los usuarios de esta entidad alicantina.