La guerra del agua tiene muy lejos su final. La polémica por el nuevo trazado que planea llevar a cabo el Gobierno en el Trasvase Júcar-Vinalopó sigue viva. La Confederación de Organizaciones Empresariales de la Comunidad Valenciana (CIERVAL), dio su apoyo a las revindicaciones que la Confederación Empresarial de la Provincia de Alicante (COEPA) ha realizado en relación al trasvase.

Fuentes empresariales aseguraron que dicho trasvase es un proyecto que está en marcha desde noviemre de 2002, de la que se ha ejecutado casi la mitad de las obras. COEPA recordó que está recogida en el Plan Hidrológico Nacional (PHN) y que los fondos europeos destinados a tal uso no pueden perderse. Las dos organziaciones afirmaron que una modificación del proyecto original supondría un retraso importante en la ejecución del trasvase, así como la pérdida de parte de la inversión realizada.

CIERVAL aprovechó la ocasión para referirse a que “siempre hemos defendido la ejecución del PHN porque el agua es imprescindible para el desarrollo de los sectores productivos valencianos y para la sociedad en su conjunto”.