Tanto el puerto de Vilagarcía como el de Ferrol comparten la característica de no encontrarse entre los primeros del ranking de puertos españoles de tráfico de cruceros. Pero también comparten el entusiasmo y la capacidad de trabajo por hacerse un hueco en esta complicada industria y mostrar los encantos y atractivos de estas dos ciudades.

Julio Hernández, Juan J. Rodríguez Pita, Sagrario Franco, Ángel del Real y Alfonso González

La presidenta de la Autoridad Portuaria de Vilagarcía, Sagrario Franco, explicaba estos días en la feria Seatrade de Miami que el objetivo es continuar captando nuevos tráficos y seguir trabajando sin prisa pero con constancia. Entre las ventajas de este puerto, aludía que es pequeño y amable y que se encuentra muy próximo a la ciudad. Es el llamado puerto de Compostela y la escala en Vilagarcía permite realizar interesantes visitas a bodegas o disfrutar del golf, de manera que el perfil del crucero que podría apostar por este enclave es medio y el crucerista responde a un poder adquisitivo medio-alto.

Ángel del Real, presidente de la Autoridad Portuaria de Ferrol, reconoce que a este puerto le queda mucho por hacer en tráfico de crucero, con trece escalas previstas para este año, pero también está seguro de que tiene mucho que ofrecer. Entre otras cosas, el arsenal más antiguo del mundo y un entorno natural y cultural de primer orden. “Queremos ir poco a poco e ir aumentando el número de escalas, sabiendo que Ferrol es un puerto de carga general y no crucerista. El “Independence of the Seas” escaló en Ferrol, así que creo que ya estamos listos para recibir a cualquier crucero”, aseguraba Del Real.