El Consejo de Ministros autorizó el pasado viernes al Ministerio de Fomento las obras de plataforma y vía del nuevo acceso ferroviario al norte y noroeste de España, Madrid-Segovia-Valladolid, en el tramo comprendido entre la Estación de Chamartín y la bifurcación de Fuencarral, en Madrid.

Con esta autorización toda la línea de alta velocidad, en lo que a plataforma se refiere, se encuentra ya en distintas fases de obra.

El presupuesto de licitación de este tramo asciende a 35.595.275,52 euros. Esta inversión sumada a los cerca de 220 millones de euros de inversión que ha recibido la línea en el plazo de dos meses pone de relieve el interés del Gobierno por la vertebración territorial mediante el desarrollo de una red mallada de infraestructuras que faciliten la movilidad de los ciudadanos.

El tramo tienen una longitud total de 4,1 kilómetros y cuenta con un plazo de ejecución de 12 meses.

Las obras se enmarcan en el seno del Plan Estratégico de Infraestructuras y Transporte (PEIT)
del Ministerio de Fomento, en el que se prevé la conexión de Madrid, Segovia y Valladolid mediante una nueva línea de alta velocidad, que favorecerá las relaciones ferroviarias del norte y noroeste con el centro peninsular.

Esta línea de alta velocidad entrará en servicio en el año 2007 e incrementará la capacidad y regularidad de las comunicaciones ferroviarias de este corredor, disminuirá la distancia de recorrido entre Madrid y Valladolid, en aproximadamente 68,5 kilómetros, pasando de los 248 kilómetros actuales a 179,5 kilómetros, una vez construida la línea.