El sistema del AVE que enlazará las ciudades de Madrid y Lleida aún no cuenta con plenas garantías de operatividad.

Su puesta en marcha en este trayecto, y en concreto del sistema de señalización, integrado por las empresas CSEE Transport y Cobra, a las que el Gobierno acusó de causar los retrasos acumulados por el AVE, todavía no cumple con “las plenas garantías de operatividad” según ha anunciado el presidente del Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF), Ramón Estribano.

En estos momentos las instalaciones del sistema disponen de un grado de funcionalidad del 90%, y en este sentido, Estribano “quiere tener todas las garantías de que el día que empiecen a circular los trenes no se repitan nuevos fallos”.