Los principales actores del transporte terrestre del puerto de Valencia han constatado avances que permiten hablar de algo más de tranquilidad en el sector. Las dos reuniones que hubo ayer confirman un acercamiento de las posiciones, aunque “habría que seguir trabajando en la misma línea”, afirmaron ayer fuentes cercanas a dichas reuniones a esta publicación.

Ayer se reunían, por un lado, la Mesa del Transporte, en la que están presentes la Conselleria de Infraestructuras y Transportes, APV, asociaciones de transportistas, y agentes de la comunidad portuaria; y por otro, la Comisión de Seguimiento, en la que, además de los agentes anteriores, habría también representantes de terminales y agentes logísticos.

Buen camino
“Vamos por el buen camino”, afirman dichas fuentes, que también constatan que el acuerdo al que llegaban recientemente el Comité Nacional de Transporte por Carretera, la dirección general de Transportes y las principales asociaciones de cargadores de España “legitima la labor que se está llevando en cuanto a la negociación, el diálogo y la búsqueda de acuerdos”.

Estos acuerdos a nivel nacional pasarían, fundamentalmente, por la creación de un plan de acción en el que se fijaran las subidas del precio del gasóleo y un mayor seguimiento de la ley que fija los pagos en el servicio del transporte. Dichos encuentros en Madrid han demostrado que los problemas que afectan a los transportistas que operan en el puerto de Valencia son, en esencia, los mismos que afectan a todos las empresas de transporte de mercancías de España.

Esta semana se antojaba clave para dilucidar si el puerto de Valencia volvería a sufrir un nuevo calendario de paros. Transcont, asociación de autopatronos que opera en el enclave valenciano, advertía la pasada semana de la “crítica situación” de los autónomos y dejaba entrever la posibilidad de que hubieran nuevas movilizaciones, un extremo que, de momento, parece descartado para las próximas semanas.