A petición de la autoridad británica competencia (UK Office of Fair Trading, OFT) y de conformidad con el Reglamento de concentraciones de la UE, la Comisión Europea ha decidido remitir la facultad de evaluar el impacto de la adquisición conjunta del aeropuerto de Exeter por Macquarie Airport Group (MAG) y Ferrovial Aeropuertos a la autoridad británica de competencia. Los compradores también controlan actualmente el aeropuerto de Bristol.

La Comisión ha decidido remitir el expediente debido a que esta fusión amenaza con obstaculizar la competencia de manera significativa en el sudoeste de Inglaterra por lo que se refiere a la prestación de servicios de infraestructuras aeroportuarias a las líneas aéreas.

Firmas
MAG, empresa con sede en el Reino Unido, pertenece al grupo Macquarie y es un fondo de inversión privado mundial con inversiones en aeropuertos e infraestructuras conexas.
En la UE, las empresas del grupo Macquarie tienen, además, el control de los aeropuertos de Roma y del aeropuerto de Bruselas y poseen acciones en los aeropuertos de Birmingham y Copenhague. Controla, asociada a Ferrovial, el aeropuerto de Bristol.

Ferrovial participa asimismo en la gestión de concesiones de infraestructuras aeroportuarias. Además de su participación en el aeropuerto de Bristol, Ferrovial tiene inversiones en el aeropuerto de Sydney, en el aeropuerto de Belfast y en el aeropuerto de Antofagasta.

Control
En su solicitud de reenvío, la OFT declara que el sudoeste de Inglaterra puede ser un mercado separado para el suministro de servicios de infraestructuras aeroportuarias a las líneas aéreas.

Dado que las partes controlan ya el aeropuerto de Bristol, la adquisición del aeropuerto de Exeter elevaría su cuota de mercado hasta el punto de suscitar inquietudes en términos de competencia.

Además, la OFT ha recibido observaciones de terceros planteando dudas sobre esta la adquisición.Por tanto, la OFT presentó una solicitud de reenvío de conformidad con el artículo 9.2 del Reglamento de concentraciones.

Competencias
Según esta disposición, la Comisión puede reenviar el asunto a una autoridad de competencia del Estado miembro cuando una concentración amenace con obstaculizar la competencia de manera significativa en el mercado de un Estado miembro, que presenta todas las características de un mercado definido.

La investigación de la Comisión indica que el mercado del producto es la prestación de servicios de infraestructura aeroportuaria a las líneas aéreas y que el mercado geográfico podía reducirse al sudoeste de Inglaterra (Bristol, Exeter, Bournemouth, Plymouth, Newquay y Southampton). Si así fuere, las cuotas de mercado de los dos aeropuertos en la región serían efectivamente suficientes para afectar potencialmente a la competencia. En estas circunstancias, la Comisión considera necesaria una investigación más a fondo y que las autoridades británicas son las mejor situadas para efectuarla.