Los miembros del Propeller Junior de Valencia protagonizaron el pasado fin de semana una jornada lúdica que sirvió para estrechar lazos y cohesionar el grupo, más allá de la actividad profesional del día a día.

Participantes en la actividad

Para dar forma al evento, Miguel J. López y Alejandro Casas se encargaron de cocinar una paella cada uno; el primero según la fórmula valenciana y el segundo siguiendo la receta castellonense.

Tanto los miembros del Propeller como sus familiares, invitados expresamente para la ocasión, tuvieron la oportunidad de compartir una magnífica jornada.